Ummmm, estas galletas están muuy buenas y seguro que si las pruebas a ti también lo vas a pensar. Claro está, si te gusta este cereal y no eres celíaco (aún en estudios).
La receta de hoy como veis son Galletas de Avena. Las he preparado por los beneficios que tiene sobre comer una galleta sin más.
En un próximo post lo detallaré más, pero entre las cualidades de la avena se encuentran:
- Posee Hidratos de Carbono de absorción lenta. Esto es lo ideal. Nos sacian y hacen que los azúcares simples se absorban más lentamente, perfecto para los diabéticos.
- Rico en aminoácidos esenciales. Nuestro cuerpo no puede sintetizarlos y obligatoriamente hay que obtenerlos de la alimentación.
- Contiene fibra insoluble. Regula el estreñimiento.
Aclaremos que aunque estas galletas llevan avena, también llevan azúcar moreno y harina. Los diabéticos pueden consumirlas, pero con moderación al igual que el resto de galletas. Hay que tenerlo en cuenta cuando hagan los cálculos de las raciones de hidratos.
Os diré que es una receta muy fácil y que en media hora la tenéis preparada.
- 230 g de Copos de Avena
- 100 g de Harina
- 75 g de Azúcar moreno
- Sacarina, equivalente a otros 60-75 g
- 3 Huevos
- 120 ml Aceite de Oliva Vírgen Extra
- Levadura química, 1 cucharadita
- Sal, un poco
Ingredientes, todos normales y fáciles de encontrar en cualquier supermercado.
Si os gusta podéis añadir alguna esencia, la canela o la vainilla van genial con estas galletas.
Os cuento que a mí no me gustan los postres muy dulces, si a vosotros sí y os gusta más el sabor del azúcar, son 150 g.
Preparación
1. Pesar todos los ingredientes que veis en la foto de arriba y mezclarlos muy bien cuando los tengáis en un bol
2. Por otro lado, batir 3 huevos
3. Mezclar el aceite de oliva con los 3 huevos
4. Juntamos en el bol grande la primera mezcla junto a los huevos y el aceite. Ahora ya tenemos todos los ingredientes preparados para que la masa nos quede homogénea con ayuda de una espátula o cuchara
5. Encendemos el horno a 180ºC
6. Sacamos la rejilla del horno y la cubrimos con un papel apto para él
Aquí no he sacado fotos porque tenía las manos pringadas y no quería manchar la cámara. La mezcla va a quedar bastante sólida y pegajosa.
Con las manos vamos dando forma a las galletas, 2 cucharas también sirven :-) y las ponemos sobre el papel de hornear.
Por supuesto las medidas que queráis teniendo en cuenta que estas galletas no crecen casi nada. Las que hice yo son más o menos de la medida de la palma de la mano. Con esa masa me salieron 16 unidades.
Metemos la rejilla en el horno con el calor por la parte superior e inferior y si tenéis ventilador, también. Si encendéis el ventilador con 170ºC será suficiente.
Id controlando para que no se quemen, pero contad con entre 10-15 minutos, según el horno. Cuando estén doraditas se pueden sacar.
Como se aprecia en la foto no es una galleta jugosa como puede ser una magdalena o un bizcocho. Sin embargo, es una galleta nutritiva e ideal para el desayuno o la merienda. Además tiene un gran poder saciante. Con número de calorías similar a las compradas, pero con la gran ventaja de que sabéis a ciencia cierta lo que llevan y evitamos tanto conservante y grasas trans. ¿Qué más se le puede pedir a una galleta?
He añadido aceite de oliva vírgen extra. Sé que algunos de vosotr@s diréis que es un sabor fuerte para un postre, pero la composición es mucho mejor que la del aceite de girasol. El aceite de girasol tiene muchos más Omega-6, al contrario de lo que mucha gente piensa, tomar en exceso tampoco es bueno. Con nuestra alimentación incluimos en nuestra dieta exceso de Omega-6 y nos falta Omega-3.
Espero que os haya gustado y que os animéis a hacerlas, ya me contaréis ;-)